Tertulianos

Hoy disparamos una bala de papel de arroz, embadurnado con tinta, contra esos periodistas que cambian su pluma por el micrófono radiofónico, esos que quitando alguna que otra excepción, se dedican a discutir sus opiniones para que millones de oyentes sintamos vergüenza ajena, de como un periodista puede estar tan mal informado, de como se puede tener el descaro de hablar de cosas de las cuales no se tiene ni puta idea con toda la naturalidad del mundo. Esos tertulianos que disputan sus razones pisándose los unos a los otros, esos a los que tenían que poner las empresas de patitas en una taberna o en un corrillo en la calle, de esta forma no engañarían a la audiencia con sus casi siempre desacertadas opiniones. Muchas veces llegan a insultarse entre ellos y a sacarse los trapos sucios, pero eso si, no te metas con ellos en una llamada telefónica al programa, para eso se unen y te sacan los ojos si es preciso. El ejemplo de acaloramiento lo ponemos con María Antonia Iglesias, una a veces buena periodista escribiendo artículos e incluso libros, pero en las tertulias se viene arriba, tildando de demagogia todo lo que esta en contra de su opinión, siendo ella una de las que mas utiliza dicha demagogia; al otro lado podemos poner a Fernando Ónega, un tipo muy calmado que raramente se enciende y nunca se deja llevar por la ira, creo que es un gran profesional y una gran ejemplo para futuros tertulianos.